Guerras y más guerras.
Le pregunté a la inteligencia artificial,
por
qué el ser humano, se esmeran tanto en pelear
hay
más de doscientos países, aunque eso no es oficial
y
solo algunos saben llevarse en paz.
Hoy
las guerras se esparcen por el planeta.
Y
lo peor sin campos de guerra, las ciudades son destruidas
y
sus habitantes aplastados entre orugas de las tanquetas,
“¿dónde
están las miserables mentes retorcidas?”.
Que
hacen que inocentes pierdan sus vidas.
Ellos
no quieren estar en sus juegos de poderosos
los
niños solo quieren correr, saltar y jugar a las escondidas
“¿dónde
están los diplomáticos? No oyen los sollozos”.
La
inteligencia artificial me contestó
que
son muchos los motivos que originan las guerras.
“Sin
embargo, todos los motivos que manifestó
no
son suficientes para sentirme mejor”.
Explorar
más allá, la mente humana,
extirpar
ese tumor maligno que está en el cerebro
“que
ha permanecido creciendo, que se esparce y emana
por
la sangre como una raíz de un enebro”.
Los
medios de comunicación y las redes sociales
tan
comunes en estos tiempos se llenan de las atrocidades
aumentan visitas y minutos con sus especiales
detallando
desde sus asientos como caen las ciudades.
Hasta
donde hemos llegado, quiero que esto se acabe
mis
letras no hacen nada, ni siquiera un fugaz pensamiento,
algo
pasajero, una interrogante, algo que destrabe,
pero soy
tan insignificante, es solamente un triste solitario lamento.
Desde el
otro extremo del mundo, desde este diminuto rincón.
Más
encima sentado en un escritorio, frente a un computador
en un
cómodo y acolchado sillón
y los
misiles vuelan, juntos con los drones, con un ruido ensordecedor.
Quitándole
el respiro a ese niño que estaba junto a su madre
y ahora
ella ha quedado herida, prefiere estar sin vida
y el
hombre de la casa, ha jurado por Alá que es su padre
que la
muerte de su hijo vengará con más sangre,
como una
tormenta, el odio toma más fuerza y cabida.
En otro
lugar de la tierra, pelean por las fronteras
ya van
más de cuatro mil fallecidos y muchos heridos.
¿Desde
donde salieron esas ficticias barreras?
un animal
no sabe que ha cruzado de país en busca de sus frutos florecidos.
Por qué
los humanos insisten en crear líneas imaginarias
las aves
migratorias no piden permiso al cruzar los espacios aéreos
¿por qué
la insensatez humana y después aumentan las plegarias?
se
arrepienten de los crímenes horrorosos y crean abucheos.
Cómo
podemos hacer entender a quien no quiere aprender.
Hasta las nuevas generaciones vienen cada vez peor.
Jugando juegos de roles de matanzas, no se puede defender
la humanidad no tiene salvación, se huele el putrefacto
hedor.
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